jueves, 1 de septiembre de 2011

El Culto a la Personalidad: Una Peligrosa Desviación que resurge


"El juicio de la persona narcisista... es tendencioso contra lo que no es "él" ni es suyo. El mundo exterior -el NO YO- es inferior, peligroso, inmoral. El individuo narcisista termina pues en una deformación enorme. El y sus cosas son sobre valorados. Todo lo exterior es subvalorado...."

ERICH FROMM. EL CORACON DEL HOMBRE.

En el himno de la Internacional Socialista dice: "No mas salvadores supremos, ni Cesar, ni burgués, ni Dios, pues nosotros mismos haremos nuestra propia redención"

DIOS LES QUEDA PEQUEÑO... Lamentable error negar al único Salvador verdadero...

Históricamente se ha demostrado que por mas capaz que sea un líder, no puede, sin un eficiente equipo de trabajo, y sobre todo, sin una actitud humilde, manejar grandes problemas sin caer en grandes desviaciones.


Cuando el personalismo se convierte en el factor determinante en un país, las rencillas personales, los complejos del gobernante, sus propias patologías, empieza a inocularse a todo el Estado. Tales gobernantes narcisistas , suelen rodearse de un amplio comité de aplausos, y periódicamente "depuran" sus filas bajo el pretexto paranoico de estar infiltrados

El culto a la personalidad de gobernantes como estrategia de perpetuación en el poder..

En el siglo XX casi una tercera parte de las naciones, dejaron en los pueblos huellas imborrables de lo que significa delegar el poder en un hombre, y estas se dieron en dos aparentes extremos: El socialismo y el fascismo, que a la postre habrían de dejar en la memoria de los pueblos el supuesto criterio de derecha e izquierda, donde se vende la idea de que la izquierda está con el pueblo y la derecha contra él, en una copia de los criterios dados por el comunismo mundial para favorecerse con la aceptación de la mayoría del pueblo.

LA DEIFICACION INICIAL DE LA PERSONA EN HITLER FUE FATAL EN ALEMANIA
El culto a la personalidad se dio con fuerza en la UNION SOVIÉTICA con Lenin, y Stalin, principalmente, en CHINA con Mao Tse Tung, en ALBANIA con Enver Hoxa, YUGOESLAVIA con el mariscal Tito, en CUBA con Fidel castro; pero también se dio con Hitler, Mussolini y Franco un esquema similar, donde grandes fotografías y un alto número de estatuas recordaban al jefe máximo, mientras juventudes, ejércitos y gran cantidad de adeptos estaban permanentemente uniformados y con banderas para declarar l unísono su adhesión al supremo líder.


Posiblemente colocar en un sólo párrafo las tendencias socialistas y las fascistas generará escozor en mas de uno, pero la realidad es la inmensa similitud psicológica e incluso ética de estos ejemplos de representantes del culto a la personalidad. Será motivo de muchos artículos profundizar en similitudes, entre las cuales están el alto grado de intolerancia que genera oleadas de propaganda contra los detractores, o su condena a la cárcel, la repatriación e incluso la muerte.

STALIN ESTRUCTURO UN PODER ILIMITADO EN LA URSS

Todos tuvieron seguidores, todos manipularon los medios hasta dejarlos solo en el oficialismo, todos estructuraron hordas de seguidores que se hacían matar por ellos, todos generaron o promovieron una ideología y en todos, en mayor a menor magnitud se generaron terribles castigos y muertes en masa, en todos hubo intrigas internas que generaron “purgas”, muertes de cercanos colaboradores (a veces moría el mas cercano colaborador suicidándose en presencia del máximo líder y sin testigos), todos se plantearon como grandes reformistas al servicio del pueblo, inicialmente, todos buscaron conflictos con otros países....



PERO LO MAS IMPORTANTE, a excepción de Cuba probablemente por el hecho de no conocerse la muerte de su dirigente máximo, y China donde se ha desarrollado estrategias continuistas y modificaciones sustanciales a su política, todos sucumbieron con la muerte de los principales dirigentes y volaron en pedazos como naciones, generándose profundas divisiones hasta encontrar nuevamente su cauce. Y algo más, podría decirse con argumentos claros, que en todos estos dirigentes se dio algún tipo de patología, y cuando menos, fueron expresiones de un narcisismo acendrado que les hacía creer que ellos solos eran el mundo y a su rededor sólo había seres inferiores.



Analizar la historia permite entender la importancia de no repetir acontecimientos dramáticamente perjudiciales, y sobre todo, no creer a partir de “verdades” expresadas bajo el manto de la intolerancia.



No hay comentarios: